18
Encuentro de Elías y Acab
Y sucedió que después de muchos días, la palabra del Señor vino a Elías en el tercer añoA 1 Rey 17:1; Luc 4:25; Sant 5:17, diciendo: Ve, muéstrate a Acab, y enviaré lluvia sobre la faz de la tierraB Deut 28:12. Y Elías fue a mostrarse a Acab. Y el hambre era intensa en Samaria. Y Acab llamó a Abdías que era mayordomo de1 Lit., que estaba sobre la casaA 1 Rey 16:9. (Y Abdías temía2 O, reverenciaba en gran manera al SeñorB Neh 7:2; Job 28:28; pues sucedió que cuando Jezabel destruyó1 Lit., cortó a los profetas del SeñorA 1 Rey 18:13, Abdías tomó a cien profetas y los escondió de cincuenta en cincuenta en una cueva, y los sustentóB Mat 10:40-42 con pan y agua.) Entonces Acab dijo a Abdías: Ve por la tierra a todas las fuentes de agua y a todos los valles1 O, arroyos; quizá hallaremos hierba y conservaremos con vida los caballos y los mulos, y no tendremos que matar2 Lit., cortar parte del ganado. Y dividieron la tierra entre ellos para recorrerla; Acab se fue solo por un camino, y Abdías se fue solo por otro.
Y estando Abdías en el camino, he aquí, Elías le salió al encuentro1 Lit., a encontrarlo, y Abdías lo reconocióA 2 Rey 1:6-8 y cayó sobre su rostro, y dijo: ¿Eres tú Elías, mi señor? Y él le respondió: Yo soy. Ve, di a tu señor: “Aquí está Elías.” Y él dijo: ¿Qué pecado he cometido1 Lit., ¿Qué he pecado yo, que entregas a tu siervo en manos de Acab para que me mate? 10 Vive el Señor tu DiosA 1 Rey 17:1, que no hay nación ni reino adonde mi señor no haya enviado a buscarte; y cuando decían: “No está aquí”, hacía jurar al reino o a la nación que no te habían hallado. 11 Y ahora dices: “Ve, di a tu señor: ‘Aquí está Elías.’ ” 12 Y sucederá que cuando te deje, el Espíritu del SeñorA 2 Rey 2:16; Ezeq 3:12, 14; Hech 8:39 te llevará adonde yo no sepa; así que cuando yo vaya y se lo diga a Acab y él no pueda encontrarte, me matará, aunque yo tu siervo he temido1 O, reverenciado al Señor desde mi juventud. 13 ¿No le han contado a mi señor lo que hice cuando Jezabel mató a los profetas del Señor, que escondí a cien1 Lit., cien hombres de los profetas del Señor de cincuenta en cincuenta en una cueva, y los sustenté con pan y aguaA 1 Rey 18:4? 14 Y ahora dices: “Ve, di a tu señor: ‘Aquí está Elías’ ”; entonces me matará. 15 Y Elías dijo: Vive el Señor de los ejércitosA 1 Rey 17:1, delante de quien estoy, que hoy ciertamente me mostraré a él.
16 Abdías fue al encuentro de Acab, y le dio aviso; y Acab fue al encuentro de Elías. 17 Y sucedió que cuando Acab vio a Elías, Acab le dijoA Jos 7:25; 1 Rey 21:20: ¿Eres tú, perturbador de Israel? 18 Y él respondió: Yo no he perturbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, porque habéis abandonado los mandamientos del SeñorA 1 Rey 9:9; 2 Crón 15:2 y habéis seguido a los baalesB 1 Rey 16:31; 21:25, 26. 19 Ahora pues, envía a reunir conmigo a todo Israel en el monte CarmeloA Jos 19:26; 2 Rey 2:25, junto con cuatrocientos cincuenta profetas de BaalB 1 Rey 18:22 y cuatrocientos profetas de la AseraC 1 Rey 16:33 que comen a la mesa de Jezabel.
Elías y los profetas de Baal
20 Acab envió mensaje a todos los hijos de Israel y reunió a los profetas en el monte Carmelo. 21 Elías se acercó a todo el pueblo y dijo: ¿Hasta cuándo vacilaréis entre1 Lit., cojearéis sobre dos opinionesA 2 Rey 17:41; Mat 6:24? Si el Señor es Dios, seguidleB Jos 24:15; y si Baal, seguidle a él. Pero el pueblo no le respondió ni una palabra. 22 Entonces Elías dijo al pueblo: Solo yo he quedado como profeta del SeñorA 1 Rey 19:10, 14, pero los profetas de Baal son cuatrocientos cincuenta hombresB 1 Rey 18:19. 23 Que nos den, pues, dos novillos; que escojan un novillo para ellos y lo despedacen, y lo coloquen sobre la leña, pero que no le pongan fuego debajo; y yo prepararé el otro novillo y lo colocaré sobre la leña, y no le pondré fuego. 24 Entonces invocad el nombre de vuestro dios, y yo invocaré el nombre del Señor; y el Dios que responda por fuego, ése es DiosA 1 Rey 18:38. Y todo el pueblo respondió y dijo: La idea es buena.
25 Y Elías dijo a los profetas de Baal: Escoged un novillo para vosotros y preparadlo primero, pues sois los más, e invocad el nombre de vuestro dios, pero no le pongáis fuego. 26 Entonces tomaron el novillo que les dieron1 Lit., les dio y lo prepararon, e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: Oh Baal, respóndenos. Pero no hubo vozA Sal 115:4, 5; Jer 10:5 ni nadie respondió. Y danzaban2 Lit., cojeaban; i.e., un tipo de danza ceremonial alrededor del altar que habían hecho3 Así en algunos mss. y versiones antiguas; en el T.M., que él había hecho. 27 Y sucedió que ya al mediodía, Elías se burlaba de ellos y decía: Clamad en voz alta, pues es un dios; tal vez estará meditando o se habrá desviado, o estará de viaje, quizá esté dormido y habrá que despertarlo. 28 Y gritaban a grandes voces y se sajaban, según su costumbreA Lev 19:28; Deut 14:1, con espadas y lanzas hasta que la sangre chorreaba sobre ellos. 29 Y sucedió que pasado el mediodía, se pusieron a gritar frenéticamente1 Lit., profetizaron hasta la hora de ofrecerse el sacrificio de la tardeA Ex 29:39, 41; pero no hubo voz, ni nadie respondió ni nadie hizo caso2 Lit., ni hubo atención.
30 Entonces Elías dijo a todo el pueblo: Acercaos a mí. Y todo el pueblo se acercó a él. Y reparó el altar del Señor que había sido derribadoA 1 Rey 19:10, 14; 2 Crón 33:16. 31 Elías tomó doce piedras conforme al número de las tribus de los hijos de Jacob, a quien había venido la palabra del Señor, diciendo: Israel será tu nombreA Gén 32:28; 35:10; 2 Rey 17:34. 32 Y con las piedras edificó un altar en el nombre del SeñorA Col 3:17, e hizo una zanja alrededor del altar, suficientemente grande para contener dos medidas1 Heb., seah; un seah equivale aprox. a 7.3 litros de semilla. 33 Dispuso después la leña, cortó el novillo en pedazos y lo colocó sobre la leñaA Gén 22:9; Lev 1:7, 8. 34 Y dijo: Llenad cuatro cántaros de agua y derramadla sobre el holocausto y sobre la leña. Después dijo: Hacedlo por segunda vez; y lo hicieron por segunda vez. Y añadió: Hacedlo por tercera vez; y lo hicieron por tercera vez. 35 El agua corría alrededor del altar, y también llenó la zanja de agua. 36 Y sucedió que a la hora de ofrecerse el sacrificio de la tardeA 1 Rey 18:29, el profeta Elías se acercó y dijo: Oh Señor, Dios de Abraham, de Isaac y de IsraelB Gén 28:13; Ex 3:6; 4:5; Mat 22:32, que se sepa hoy que tú eres Dios en IsraelC 1 Rey 8:43, que yo soy tu siervo y que he hecho todas estas cosas por palabra tuyaD Núm 16:28-32. 37 Respóndeme, oh Señor, respóndeme, para que este pueblo sepa que tú, oh Señor, eres Dios, y que has hecho volver sus corazones. 38 Entonces cayó el fuego del Señor, y consumió el holocaustoA Gén 15:17; Lev 9:24; 10:1, 2; Jue 6:21; 2 Rey 1:12; 1 Crón 21:26; 2 Crón 7:1; Job 1:16, la leña, las piedras y el polvo, y lamió el agua de la zanja. 39 Cuando todo el pueblo lo vio, se postraron sobre su rostro y dijeron: El Señor, El es DiosA 1 Rey 18:21, 24; el Señor, El es Dios. 40 Entonces Elías les dijo: Prended a los profetas de Baal, que no se escape ninguno de ellos. Los prendieron, y Elías los hizo bajar al torrente CisónA Jue 4:7; 5:21 y allí los degollóB Deut 13:5; 18:20; 2 Rey 10:24, 25.
Fin de la sequía
41 Y Elías dijo a Acab: Sube, come y bebe; porque se oye el estruendo de mucha lluvia. 42 Acab subió a comer y a beber, pero Elías subió a la cumbre del CarmeloA 1 Rey 18:19, 20; y allí se agachó en tierraB Sant 5:18 y puso su rostro entre las rodillas. 43 Y dijo a su criado: Sube ahora, y mira hacia el1 Lit., camino del mar. Y él subió, miró y dijo: No hay nada. Y Elías dijo siete veces: Vuelve a mirar. 44 Y sucedió que a la séptima vez, él dijo: He aquí, una nubeA Luc 12:54 tan pequeña como la mano1 Lit., palma de un hombre sube del mar. Y dijo: Sube, y di a Acab: “Prepara2 Lit., Ata, unce tu carro y desciende, para que la fuerte lluvia no te detenga.” 45 Y sucedió que al poco tiempo, el cielo se oscureció con nubes y viento, y hubo gran lluvia. Y Acab montó en su carro y fue a JezreelA Jos 17:16; Jue 6:33. 46 Y la mano del Señor estaba sobre ElíasA 2 Rey 3:15; Isa 8:11; Ezeq 3:14, el cual ciñó sus lomosB 2 Rey 4:29; Jer 1:17; 1 Ped 1:13 y corrió delante de Acab hasta1 Lit., hasta tu entrada a Jezreel.

A18:1: 1 Rey 17:1; Luc 4:25; Sant 5:17

B18:1: Deut 28:12

118:3: Lit., que estaba sobre

A18:3: 1 Rey 16:9

218:3: O, reverenciaba

B18:3: Neh 7:2; Job 28:28

118:4: Lit., cortó

A18:4: 1 Rey 18:13

B18:4: Mat 10:40-42

118:5: O, arroyos

218:5: Lit., cortar

118:7: Lit., a encontrarlo

A18:7: 2 Rey 1:6-8

118:9: Lit., ¿Qué he pecado yo

A18:10: 1 Rey 17:1

A18:12: 2 Rey 2:16; Ezeq 3:12, 14; Hech 8:39

118:12: O, reverenciado

118:13: Lit., cien hombres

A18:13: 1 Rey 18:4

A18:15: 1 Rey 17:1

A18:17: Jos 7:25; 1 Rey 21:20

A18:18: 1 Rey 9:9; 2 Crón 15:2

B18:18: 1 Rey 16:31; 21:25, 26

A18:19: Jos 19:26; 2 Rey 2:25

B18:19: 1 Rey 18:22

C18:19: 1 Rey 16:33

118:21: Lit., cojearéis sobre

A18:21: 2 Rey 17:41; Mat 6:24

B18:21: Jos 24:15

A18:22: 1 Rey 19:10, 14

B18:22: 1 Rey 18:19

A18:24: 1 Rey 18:38

118:26: Lit., les dio

A18:26: Sal 115:4, 5; Jer 10:5

218:26: Lit., cojeaban; i.e., un tipo de danza ceremonial

318:26: Así en algunos mss. y versiones antiguas; en el T.M., que él había hecho

A18:28: Lev 19:28; Deut 14:1

118:29: Lit., profetizaron

A18:29: Ex 29:39, 41

218:29: Lit., ni hubo atención

A18:30: 1 Rey 19:10, 14; 2 Crón 33:16

A18:31: Gén 32:28; 35:10; 2 Rey 17:34

A18:32: Col 3:17

118:32: Heb., seah; un seah equivale aprox. a 7.3 litros

A18:33: Gén 22:9; Lev 1:7, 8

A18:36: 1 Rey 18:29

B18:36: Gén 28:13; Ex 3:6; 4:5; Mat 22:32

C18:36: 1 Rey 8:43

D18:36: Núm 16:28-32

A18:38: Gén 15:17; Lev 9:24; 10:1, 2; Jue 6:21; 2 Rey 1:12; 1 Crón 21:26; 2 Crón 7:1; Job 1:16

A18:39: 1 Rey 18:21, 24

A18:40: Jue 4:7; 5:21

B18:40: Deut 13:5; 18:20; 2 Rey 10:24, 25

A18:42: 1 Rey 18:19, 20

B18:42: Sant 5:18

118:43: Lit., camino del

A18:44: Luc 12:54

118:44: Lit., palma

218:44: Lit., Ata, unce

A18:45: Jos 17:16; Jue 6:33

A18:46: 2 Rey 3:15; Isa 8:11; Ezeq 3:14

B18:46: 2 Rey 4:29; Jer 1:17; 1 Ped 1:13

118:46: Lit., hasta tu entrada a