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Discurso de Josué en Siquem
Entonces Josué reunió a todas las tribus de Israel en Siquem, llamó a los ancianos de Israel, a sus jefes, a sus jueces y a sus oficialesA Jos 23:2, y ellos se presentaron delante de Dios. Y Josué dijo a todo el pueblo: Así dice el Señor, Dios de Israel: “Al otro lado del Río1 I.e., el Eufrates, y así en el resto del cap. habitaban antiguamente vuestros padres, es decir, TaréA Gén 11:27-32, padre de Abraham y de2 Lit., y el padre de Nacor, y servían a otros dioses. “Entonces tomé a vuestro padre Abraham del otro lado del RíoA Gén 12:1; 24:7 y lo guié por toda la tierra de Canaán, multipliqué su descendencia1 Lit., simienteB Gén 15:5 y le di a IsaacC Gén 21:3. “Y a Isaac le di a Jacob y a EsaúA Gén 25:25, 26, y a Esaú le di el monte Seir para que lo poseyeraB Gén 36:8; Deut 2:5; pero Jacob y sus hijos descendieron a EgiptoC Gén 46:6, 7. “Entonces envié a Moisés y a AarónA Ex 4:14-17, y herí con plagas a Egipto conforme a lo que hice en medio de él; y después os saqué. A Ex 14:2-31Saqué a vuestros padres de Egipto y llegasteis al mar, y Egipto persiguió a vuestros padres con carros y caballería hasta el mar Rojo1 Lit., mar de Cañas. “Pero cuando clamaron al Señor, El puso tinieblas entre vosotros y los egipcios, e hizo venir sobre ellos el mar, que los cubrió; y vuestros propios ojos vieron lo que hice en Egipto. Y por mucho tiempo vivisteis en el desiertoA Deut 1:46; 2:14. “Entonces os traje a la tierra de los amorreos que habitaban al otro lado del Jordán, y ellos pelearon contra vosotros; los entregué en vuestras manos, y tomasteis posesión de su tierra cuando yo los destruí delante de vosotrosA Núm 21:21-32. A Núm 22:2-6Entonces Balac, hijo de Zipor, rey de Moab, se levantó y peleó contra Israel, y envió a llamar a Balaam, hijo de Beor, para que os maldijera. 10 “Pero yo no quise escuchar a Balaam; y él tuvo que bendecirosA Deut 23:5, y os libré de su mano. 11 “Pasasteis el JordánA Jos 3:14-17 y llegasteis a Jericó; y los habitantes de Jericó pelearon contra vosotros, y también los amorreos, los ferezeos, los cananeos, los hititas, los gergeseos, los heveos y los jebuseosB Ex 23:23, 28; Deut 7:1. Y los entregué en vuestras manosC Ex 23:31. 12 “Entonces envié delante de vosotros avispas que1 Lit., que los expulsaron a los dos reyes de los amorreos de delante de vosotrosA Ex 23:28; Deut 7:20, pero no fue por vuestra espada ni por vuestro arcoB Sal 44:3. 13 “Y os di una tierra en que no habíais trabajado, y ciudades que no habíais edificado, y habitáis en ellas; de viñas y olivares que no plantasteis, coméisA Deut 6:10, 11.”
14 Ahora pues, temed1 O, reverenciad al Señor y servidle con integridad y con fidelidad; quitad los dioses que vuestros padres sirvieron al otro lado del Río y en Egipto, y servid al SeñorA Deut 10:12; 18:13; 1 Sam 12:24. 15 Y si no os parece bien servir al Señor, escoged hoy a quién habéis de servir: si a los dioses que sirvieron vuestros padres, que estaban al otro lado del Río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáisA Jue 6:10; pero yo y mi casa, serviremos al Señor.
16 Y el pueblo respondió, y dijo: Lejos esté de nosotros abandonar al Señor para servir a otros dioses; 17 porque el Señor nuestro Dios es el que nos sacó, a nosotros y a nuestros padres, de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre1 Lit., esclavos, el que hizo estas grandes señales delante de nosotros y nos guardó por todo el camino en que anduvimos y entre todos los pueblos por entre los cuales pasamos. 18 Y el Señor echó de delante de nosotros a todos los pueblos, incluso a los amorreos, que moraban en la tierra. Nosotros, pues, también serviremos al Señor, porque El es nuestro Dios.
Pacto del pueblo en Siquem
19 Entonces Josué dijo al pueblo: No podréis servir al Señor, porque El es Dios santoA Lev 19:2; 20:7, 26, El es Dios celosoB Ex 20:5; 34:14; El no perdonará vuestra transgresiónC Ex 23:21 ni vuestros pecados. 20 Si abandonáis al Señor y servís a dioses extranjeros, El se volverá y os hará daño, y os consumiráA Deut 4:25, 26 después de haberos hecho bien. 21 Respondió el pueblo a Josué: No, sino que serviremos al Señor. 22 Y Josué dijo al pueblo: Vosotros sois testigos contra vosotros mismos de que habéis escogido al Señor para servirleA Sal 119:173. Y dijeron: Testigos somos. 23 Ahora pues, quitad los dioses extranjeros que están en medio de vosotros, e inclinad vuestro corazón al SeñorA 1 Rey 8:57, 58; Sal 119:36; 141:4, Dios de Israel. 24 Y el pueblo respondió a Josué: Al Señor nuestro Dios serviremos y su voz obedeceremos1 Lit., escucharemosA Ex 19:8; 24:3, 7; Deut 5:27. 25 Entonces Josué hizo un pacto con el pueblo aquel díaA Ex 24:8, y les impuso estatutos y ordenanzas en Siquem. 26 Y escribió Josué estas palabras en el libro de la ley de DiosA Deut 31:24; y tomó una gran piedra y la colocó allí debajo de la encina que estaba junto al santuario del Señor. 27 Y dijo Josué a todo el pueblo: He aquí, esta piedra servirá de testigo contra nosotros, porque ella ha oído todas las palabras que el Señor ha hablado con nosotrosA Jos 22:27, 34; será, pues, testigo contra vosotros para que no neguéis a vuestro Dios. 28 Entonces Josué despidió al pueblo, cada uno a su heredad.
Muerte de Josué
29 A Jue. 2:6-10 Y sucedió que después de estas cosas Josué, hijo de Nun, siervo del Señor, murió a la edad de ciento diez años. 30 Y lo sepultaron en la tierra de su heredad, en Timnat-sera, que está en la región montañosa de EfraínA Jos 19:50, al norte del monte Gaas. 31 Y sirvió Israel al Señor todos los días de Josué y todos los días de los ancianos que sobrevivieron a1 Lit., prolongaron días después de Josué y que habían conocido todas las obras que el Señor había hecho por IsraelA Jue 2:6, 7.
32 Los huesos de José, que los hijos de Israel habían traído de EgiptoA Gén 50:24, 25; Ex 13:19, fueron sepultados en Siquem, en la parcela de campo que Jacob había comprado a los hijos de Hamor, padre de Siquem, por cien monedas de plata1 Heb., kesita; moneda muy antigua de un valor superior a un sicloB Gén 33:19; Hech 7:15, 16; y pasaron a ser posesión de los hijos de JoséC Juan 4:5. 33 Y murió Eleazar, hijo de Aarón; y lo sepultaron en el collado1 O, en Guibeá de su hijo FineesA Jos 22:13, que le había sido dado en la región montañosa de Efraín.

A24:1: Jos 23:2

124:2: I.e., el Eufrates, y así en el resto del cap.

A24:2: Gén 11:27-32

224:2: Lit., y el padre de

A24:3: Gén 12:1; 24:7

124:3: Lit., simiente

B24:3: Gén 15:5

C24:3: Gén 21:3

A24:4: Gén 25:25, 26

B24:4: Gén 36:8; Deut 2:5

C24:4: Gén 46:6, 7

A24:5: Ex 4:14-17

A24:6: Ex 14:2-31

124:6: Lit., mar de Cañas

A24:7: Deut 1:46; 2:14

A24:8: Núm 21:21-32

A24:9: Núm 22:2-6

A24:10: Deut 23:5

A24:11: Jos 3:14-17

B24:11: Ex 23:23, 28; Deut 7:1

C24:11: Ex 23:31

124:12: Lit., que los

A24:12: Ex 23:28; Deut 7:20

B24:12: Sal 44:3

A24:13: Deut 6:10, 11

124:14: O, reverenciad

A24:14: Deut 10:12; 18:13; 1 Sam 12:24

A24:15: Jue 6:10

124:17: Lit., esclavos

A24:19: Lev 19:2; 20:7, 26

B24:19: Ex 20:5; 34:14

C24:19: Ex 23:21

A24:20: Deut 4:25, 26

A24:22: Sal 119:173

A24:23: 1 Rey 8:57, 58; Sal 119:36; 141:4

124:24: Lit., escucharemos

A24:24: Ex 19:8; 24:3, 7; Deut 5:27

A24:25: Ex 24:8

A24:26: Deut 31:24

A24:27: Jos 22:27, 34

A24:29: Jue. 2:6-10

A24:30: Jos 19:50

124:31: Lit., prolongaron días después de

A24:31: Jue 2:6, 7

A24:32: Gén 50:24, 25; Ex 13:19

124:32: Heb., kesita; moneda muy antigua de un valor superior a un siclo

B24:32: Gén 33:19; Hech 7:15, 16

C24:32: Juan 4:5

124:33: O, en Guibeá

A24:33: Jos 22:13