9
Arrepentimiento y confesión
El día veinticuatro de este mesA Neh 8:2 se congregaron los hijos de Israel en ayunoB Esd 8:23, vestidos de cilicio y con polvo sobre síC 1 Sam 4:12. Y los descendientes1 Lit., la simiente de Israel se separaron de todos los extranjerosA Esd 10:11; Neh 13:3, y se pusieron en pie, confesando sus pecados y las iniquidades de sus padresB Prov 28:13; Jer 3:13. Puestos de pie, cada uno en su lugarA Neh 8:4, leyeron en el libro de la ley del Señor su Dios por una cuarta parte del día; y por otra cuarta parte confesaron y adoraron al Señor su Dios. Y sobre el estrado de los levitas se levantaron Jesúa, Bani, Cadmiel, Sebanías, Buni, Serebías, BaniA Neh 8:7 y Quenani, y clamaron en alta voz al Señor su Dios.
Entonces los levitas, Jesúa, Cadmiel, Bani, Hasabnías, Serebías, Hodías, Sebanías y Petaías, dijeron: Levantaos, bendecid al Señor vuestro Dios por siempre y para siempre.
Sea bendito tu glorioso nombre
y exaltado sobre toda bendición y alabanza.
Sólo tú eres el SeñorA Deut 6:4; 2 Rey 19:15.
Tú hiciste los cielos,
los cielos de los cielos con todo su ejército,
la tierra y todo lo que en ella hayB Gén 1:1,
los mares y todo lo que en ellos hay.
Tú das vida a todos ellosC Col 1:16, 17
y el ejército de los cielos se postra ante ti.
Tú eres el Señor Dios
que escogiste a AbramA Gén 12:1,
lo sacaste de Ur de los CaldeosB Gén 11:31
y le diste por nombre AbrahamC Gén 17:5.
Hallaste fiel su corazón delante de ti,
e hiciste con él un pacto
para darle la tierra del cananeo,
del hitita, del amorreo,
del ferezeo, del jebuseo y del gergeseo,
para darla a su descendencia1 Lit., simienteA Gén 15:6, 18-21.
Y has cumplido tu palabraB Jos 21:43-45, porque eres justo.
 
Tú viste la aflicción de nuestros padres en EgiptoA Ex 3:7,
y escuchaste su clamor junto al mar Rojo1 Lit., mar de CañasB Ex 14:10-14, 31.
10 Entonces hiciste señales y maravillas contra FaraónA Ex 5:2; 7:8-12:32,
contra todos sus siervos y contra todo el pueblo de su tierra;
pues supiste que ellos los trataban con soberbia,
y te hiciste un nombreB Ex 9:16 como el de hoy.
11 Dividiste el mar delante de ellosA Ex 14:21,
y pasaron por medio del mar sobre tierra firme;
y echaste en los abismos a sus perseguidores,
como a una piedra en aguas turbulentas1 Lit., poderosasB Ex 15:1, 5, 10.
12 Con columna de nube los guiaste de día,
y con columna de fuego de noche,
para alumbrarles el camino
en que debían andarA Ex 13:21, 22.
13 Luego bajaste sobre el monte SinaíA Ex 19:11, 18-20,
y desde el cielo hablaste con ellosB Ex 20:1;
les diste ordenanzas justas y leyes verdaderas,
estatutos y mandamientos buenosC Sal 19:7-9.
14 Les hiciste conocer tu santo día de reposoA Ex 16:23; 20:8,
y les prescribiste mandamientos, estatutos y la ley
por medio1 Lit., mano de tu siervo Moisés.
15 Les proveíste pan del cielo para su hambreA Ex 16:4, 14, 15,
les sacaste agua de la peña para su sedB Ex 17:6; Núm 20:7-13,
y les dijiste que entraran a poseer
la tierra que tú habías jurado darles1 Lit., levantaste tu mano para darlesC Deut 1:8, 21.
 
16 Pero ellos, nuestros padres, obraron con soberbiaA Neh 9:10,
endurecieron su cerviz y no escucharon tus mandamientosB Deut 1:26-33; 31:27; Neh 9:29.
17 Rehusaron escuchar,
y no se acordaron de las maravillas que hiciste entre ellosA Sal 78:11, 42-55;
endurecieron su cerviz y eligieron un jefe para volver a su esclavitud en Egipto1 Así en algunos mss. y en la versión gr. (Sept.); en el T.M., en su rebeliónB Núm 14:4.
Pero tú eres un Dios de perdón,
clemente y compasivo,
lento para la ira y abundante en misericordiaC Ex 34:6, 7; Núm 14:18,
y no los abandonaste.
18 Ni siquiera cuando se hicieron
un becerro de metal fundido
y dijeron: “Este es tu Dios
que te sacó de Egipto”,
y cometieron grandes blasfemias1 Lit., provocacionesA Ex 32:4-8, 31,
19 tú, en tu gran compasión,
no los abandonaste en el desiertoA Neh 9:27, 31;
la columna de nube no los dejó de día,
para guiarlos en el camino,
ni la columna de fuego de noche, para alumbrarles el camino por donde debían andarB Neh 9:12.
20 Y diste tu buen Espíritu para instruirlesA Neh 9:30; Núm 11:17; Isa 63:11-14,
no retiraste tu maná de su boca,
y les diste agua para su sed.
21 Por cuarenta años proveíste para ellos en el desierto y nada les faltóA Deut 2:7,
sus vestidos no se gastaron ni se hincharon sus pies.
22 También les diste reinos y pueblos,
y se los repartiste con sus límites1 Lit., lado.
Y tomaron posesión de la tierra de Sehón, rey2 Así en un ms. y en la versión gr. (Sept.); en el T.M., y la tierra del rey de Hesbón,
y la tierra de Og, rey de BasánA Núm 21:21-35.
23 Y multiplicaste sus hijos como las estrellas del cieloA Gén 15:5; 22:17,
y los llevaste a la tierra
que habías dicho a sus padres que entraran a poseerla.
24 Y entraron los hijos y poseyeron la tierraA Jos 11:23; 21:43.
Y tú sometiste delante de ellos a los habitantes de la tierra, a los cananeos,
y los entregaste en su mano, con sus reyes y los pueblos de la tierra,
para hacer con ellos como quisieranB Jos 18:1.
25 Y capturaron ciudades fortificadasA Deut 3:5 y una tierra fértil1 Lit., de grosuraB Núm 13:27.
Tomaron posesión de casas llenas de toda cosa buena,
cisternas excavadas, viñas y olivares,
y árboles frutales en abundanciaC Deut 6:11.
Y comieron, se saciaron, engordaronD Deut 32:15
y se deleitaron en tu gran bondadE 1 Rey 8:66.
 
26 Pero fueron desobedientes y se rebelaron contra tiA Jue 2:11,
echaron tu ley a sus espaldasB 1 Rey 14:9,
mataron a tus profetasC 2 Crón 36:16 que los amonestaban1 O, les testificaban
para que se volvieran a tiD Neh 9:30,
y cometieron grandes blasfemias2 Lit., provocacionesE Neh 9:18.
27 Entonces los entregaste en mano de sus enemigos, que los oprimieronA Jue 2:14,
pero en el tiempo de su angustia clamaron a ti,
y tú escuchaste desde el cielo, y conforme a tu gran compasiónB Deut 4:29
les diste libertadores que los libraron de mano de sus opresoresC Jue 2:16.
28 Pero cuando tenían descansoA Jue 3:11, volvían a hacer lo malo delante de ti;
por eso tú los abandonabas en mano de sus enemigos para que los dominaran;
y cuando clamaban de nuevo a ti, tú oías desde el cielo
y muchas veces los rescataste conforme a tu compasiónB Sal 106:43.
29 Los amonestaste1 O, Les testificaste para que volvieran a tu leyA Neh 9:26, 30,
pero ellos obraron con soberbia y no escucharon tus mandamientosB Neh 9:10, 16, sino que pecaron contra tus ordenanzas,
las cuales si el hombre las cumple, por ellas viviráC Lev 18:5.
Y dieron la espalda en rebeldía, endurecieron su cerviz y no escucharonD Zac 7:11.
30 Sin embargo, tú los soportaste por muchos añosA Sal 95:10; Hech 13:18,
y los amonestaste1 O, les testificasteB 2 Rey 17:13-18; 2 Crón 36:15, 16; Neh 9:26, 29 con tu EspírituC Neh 9:20 por medio2 Lit., mano de tus profetas,
pero no prestaron oído.
Entonces los entregaste en mano de los pueblos de estas3 Lit., las tierras.
31 Pero en tu gran compasión no los
exterminasteA Jer 4:27 ni los abandonaste,
porque tú eres un Dios clemente y compasivoB Neh 9:17.
 
32 Ahora pues, Dios nuestro, Dios grande, poderoso y temible, que guardas el pacto y la misericordiaA Neh 1:5,
no parezca insignificante ante ti toda la aflicción
que nos ha sobrevenido, a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros sacerdotes, a nuestros profetas, a nuestros padres y a todo tu pueblo,
desde los días de los reyes de AsiriaB 2 Rey 15:19, 29; 17:3-6; Esd 4:2 hasta el día de hoy.
33 Mas tú eres justo en todo lo que ha venido sobre nosotros,
porque tú has obrado fielmenteA Gén 18:25; Jer 12:1,
pero nosotros perversamente.
34 Nuestros reyes, nuestros jefes, nuestros sacerdotes y nuestros padres no han observado tu ley
ni han hecho caso a tus mandamientos ni a tus amonestaciones1 Lit., testimonios con que los amonestabas2 O, testificabas.
35 Pero ellos en su propio reino,
con los1 Lit., tus muchos bienes que tú les diste,
con la espaciosa y rica tierra2 Lit., tierra de grosura que pusiste delante de ellosA Neh 9:25,
no te sirvieron ni se convirtieron de sus malas obrasB Deut 28:47.
36 He aquí, hoy somos esclavos,
y en cuanto a la tierra que diste a nuestros padres
para comer de sus frutos y de sus bienes,
he aquí, somos esclavos en ellaA Deut 28:48.
37 Y su abundante fruto es para los reyes
que tú pusiste sobre nosotrosA Deut 28:33 a causa de nuestros pecados,
los cuales dominan nuestros cuerpos
y nuestros ganados como les place,
y en gran angustia estamos.
38 1 En el texto heb., cap 10:1A causa de todo esto, nosotros hacemos un pacto fiel por escritoA Neh 10:29; y en el documento sellado están los nombres de nuestros jefesB Neh 10:1, nuestros levitas y nuestros sacerdotes.

A9:1: Neh 8:2

B9:1: Esd 8:23

C9:1: 1 Sam 4:12

19:2: Lit., la simiente

A9:2: Esd 10:11; Neh 13:3

B9:2: Prov 28:13; Jer 3:13

A9:3: Neh 8:4

A9:4: Neh 8:7

A9:6: Deut 6:4; 2 Rey 19:15

B9:6: Gén 1:1

C9:6: Col 1:16, 17

A9:7: Gén 12:1

B9:7: Gén 11:31

C9:7: Gén 17:5

19:8: Lit., simiente

A9:8: Gén 15:6, 18-21

B9:8: Jos 21:43-45

A9:9: Ex 3:7

19:9: Lit., mar de Cañas

B9:9: Ex 14:10-14, 31

A9:10: Ex 5:2; 7:8-12:32

B9:10: Ex 9:16

A9:11: Ex 14:21

19:11: Lit., poderosas

B9:11: Ex 15:1, 5, 10

A9:12: Ex 13:21, 22

A9:13: Ex 19:11, 18-20

B9:13: Ex 20:1

C9:13: Sal 19:7-9

A9:14: Ex 16:23; 20:8

19:14: Lit., mano

A9:15: Ex 16:4, 14, 15

B9:15: Ex 17:6; Núm 20:7-13

19:15: Lit., levantaste tu mano para darles

C9:15: Deut 1:8, 21

A9:16: Neh 9:10

B9:16: Deut 1:26-33; 31:27; Neh 9:29

A9:17: Sal 78:11, 42-55

19:17: Así en algunos mss. y en la versión gr. (Sept.); en el T.M., en su rebelión

B9:17: Núm 14:4

C9:17: Ex 34:6, 7; Núm 14:18

19:18: Lit., provocaciones

A9:18: Ex 32:4-8, 31

A9:19: Neh 9:27, 31

B9:19: Neh 9:12

A9:20: Neh 9:30; Núm 11:17; Isa 63:11-14

A9:21: Deut 2:7

19:22: Lit., lado

29:22: Así en un ms. y en la versión gr. (Sept.); en el T.M., y la tierra del rey

A9:22: Núm 21:21-35

A9:23: Gén 15:5; 22:17

A9:24: Jos 11:23; 21:43

B9:24: Jos 18:1

A9:25: Deut 3:5

19:25: Lit., de grosura

B9:25: Núm 13:27

C9:25: Deut 6:11

D9:25: Deut 32:15

E9:25: 1 Rey 8:66

A9:26: Jue 2:11

B9:26: 1 Rey 14:9

C9:26: 2 Crón 36:16

19:26: O, les testificaban

D9:26: Neh 9:30

29:26: Lit., provocaciones

E9:26: Neh 9:18

A9:27: Jue 2:14

B9:27: Deut 4:29

C9:27: Jue 2:16

A9:28: Jue 3:11

B9:28: Sal 106:43

19:29: O, Les testificaste

A9:29: Neh 9:26, 30

B9:29: Neh 9:10, 16

C9:29: Lev 18:5

D9:29: Zac 7:11

A9:30: Sal 95:10; Hech 13:18

19:30: O, les testificaste

B9:30: 2 Rey 17:13-18; 2 Crón 36:15, 16; Neh 9:26, 29

C9:30: Neh 9:20

29:30: Lit., mano

39:30: Lit., las

A9:31: Jer 4:27

B9:31: Neh 9:17

A9:32: Neh 1:5

B9:32: 2 Rey 15:19, 29; 17:3-6; Esd 4:2

A9:33: Gén 18:25; Jer 12:1

19:34: Lit., testimonios

29:34: O, testificabas

19:35: Lit., tus

29:35: Lit., tierra de grosura

A9:35: Neh 9:25

B9:35: Deut 28:47

A9:36: Deut 28:48

A9:37: Deut 28:33

19:38: En el texto heb., cap 10:1

A9:38: Neh 10:29

B9:38: Neh 10:1