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Salmo de Acción de Gracias por la Justicia de Dios
Para el director del coro; sobre Mut Laben† I.e. Muerte al Hijo. Salmo de David.
1 Daré gracias al Señor con todo mi corazónA Sal 86:12;
Todas Tus maravillas contaréB Sal 26:7.
2 En Ti me alegraré y me regocijaréA Sal 5:11; 104:34;
Cantaré alabanzas a Tu nombreB Sal 66:2, 4, oh AltísimoC Sal 83:18; 92:1.
 
3 Cuando mis enemigos retroceden,
Tropiezan y perecen delante de TiA Sal 27:2.
4 Porque Tú has mantenido mi derecho y mi causaA Sal 140:12;
Te sientas en el trono juzgando con justiciaB Sal 50:6.
5 Has reprendido a las nacionesA Sal 119:21, has destruido al impío,
Has borrado su nombre para siempreB Sal 69:28; Prv 10:7.
6 El enemigo ha llegado a su fin en desolación eterna,
Y Tú has destruido sus ciudades;
Su recuerdo ha perecido con ellasA Sal 34:16.
 
7 Pero el Señor permanece para siempreA Sal 10:16;
Ha establecido Su trono para juicioB Sal 89:14,
8 Y juzgará al mundo con justicia;
Con equidad ejecutará juicio sobre los pueblosA Sal 96:13; 98:9.
9 El Señor será también baluarte para el oprimido,
Baluarte en tiempos de angustiaA Sal 32:7; 59:9, 16, 17.
10 En Ti pondrán su confianza los que conocen Tu nombreA Sal 91:14,
Porque Tú, oh Señor, no abandonas a los que Te buscanB Sal 37:28; 94:14.
 
11 Canten alabanzas al Señor, que mora en SionA Sal 76:2;
Proclamen entre los pueblos Sus proezasB Sal 105:1; 107:22.
12 Porque el que pide cuentas de la sangreA Gn 9:5; Sal 72:14 derramada, se acuerda de ellos;
No olvida el clamor de los afligidosB Sal 9:18.
13 Oh Señor, ten piedad de mí;
Mira mi aflicción por causa de los que me aborrecenA Sal 38:19,
Tú que me levantas de las puertas de la muerteB Sal 30:3; 86:13;
14 Para que yo cuente todas Tus alabanzasA Sal 106:2,
Para que en las puertas de la hija de Sion
Me regocije en Tu salvaciónB Sal 13:5; 20:5; 35:9; 51:12.
15 Las naciones se han hundido en el foso que hicieronA Sal 7:15, 16;
En la red que escondieron, su propio pie quedó prendidoB Sal 57:6.
16 El Señor se ha dado a conocerA Ex 7:5;
Ha ejecutado juicioB Sal 9:4.
El impío es atrapado en la obra de sus propias manos. (Higaion, Selah)
 
17 Los impíos volverán al SeolA Sal 49:14,
O sea, todas las naciones que se olvidan de DiosB Job 8:13; Sal 50:22.
18 Pues el necesitado no será olvidado para siempreA Sal 9:12; 12:5,
Ni la esperanza de los afligidos perecerá eternamenteB Sal 62:5; 71:5; Prv 23:18.
19 Levántate, oh SeñorA Núm 10:35; no prevalezca el hombre;
Sean juzgadas las naciones delante de TiB Sal 9:5.
20 Pon temor en ellasA Sal 14:5, oh Señor;
Aprendan las naciones que no son más que hombresB Sal 62:9. (Selah)

†^ I.e. Muerte al Hijo

A9:1 Sal 86:12

B9:1 Sal 26:7

A9:2 Sal 5:11; 104:34

B9:2 Sal 66:2, 4

C9:2 Sal 83:18; 92:1

A9:3 Sal 27:2

A9:4 Sal 140:12

B9:4 Sal 50:6

A9:5 Sal 119:21

B9:5 Sal 69:28; Prv 10:7

A9:6 Sal 34:16

A9:7 Sal 10:16

B9:7 Sal 89:14

A9:8 Sal 96:13; 98:9

A9:9 Sal 32:7; 59:9, 16, 17

A9:10 Sal 91:14

B9:10 Sal 37:28; 94:14

A9:11 Sal 76:2

B9:11 Sal 105:1; 107:22

A9:12 Gn 9:5; Sal 72:14

B9:12 Sal 9:18

A9:13 Sal 38:19

B9:13 Sal 30:3; 86:13

A9:14 Sal 106:2

B9:14 Sal 13:5; 20:5; 35:9; 51:12

A9:15 Sal 7:15, 16

B9:15 Sal 57:6

A9:16 Ex 7:5

B9:16 Sal 9:4

A9:17 Sal 49:14

B9:17 Job 8:13; Sal 50:22

A9:18 Sal 9:12; 12:5

B9:18 Sal 62:5; 71:5; Prv 23:18

A9:19 Núm 10:35

B9:19 Sal 9:5

A9:20 Sal 14:5

B9:20 Sal 62:9

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