1 Aconteció que en la primavera1 Lit al regreso del año, en el tiempo cuando los reyes salen a la batalla, David envió a Joab y con él a sus siervos y a todo Israel, y destruyeron a los AmonitasA 2 Sam 10:14; 1 Rey 20:22, 26 y sitiaron a RabáB 2 Sam 12:26-29; Jer 49:2, 3; Am 1:14. Pero David permaneció en JerusalénC 1 Cró 20:1.

2 Al atardecer David se levantó de su lecho y se paseaba por el terrado de la casa del rey, y desde el terradoA Dt 22:8; 1 Sam 9:25; Mat 24:17; Hech 10:9 vio a una mujer que se estaba bañando; y la mujer era de aspecto muy hermoso. 3 David mandó a preguntar acerca de aquella mujer. Y alguien dijo: “¿No es ésta Betsabé, hija de EliamA 1 Cró 3:5, mujer de Urías el HititaB 2 Sam 23:39?” 4 David envió mensajeros y la tomaron; y cuando ella vino a él, él durmió con ellaA Sal 51:Subtítulo; Sant 1:14, 15. Después que ella se purificó de su inmundiciaB Lv 12:2-5; 15:18-28; 18:19, regresó a su casa. 5 Y Betsabé concibió; y envió aviso a David diciéndole: “Estoy encintaA Lv 20:10; Dt 22:22.”

6 Entonces David envió a decir a Joab: “Envíame a Urías el Hitita.” Y Joab envió a Urías a David. 7 Cuando Urías vino a él, David le preguntó por1 Lit por el bienestar de JoabA Gn 37:14; 1 Sam 17:22, por1 Lit por el bienestar de el pueblo y por el estado de la guerra. 8 Después dijo David a Urías: “Desciende a tu casa, y lava tus piesA Gn 43:24; Luc 7:44.” Salió Urías de la casa del rey, y tras él fue enviado1 Lit salió un obsequio del rey. 9 Pero Urías durmió a la entrada de la casa del rey con todos los siervos de su señor, y no bajó a su casaA 1 Rey 14:27, 28.

10 Cuando se lo contaron a David, le dijeron: “Urías no bajó a su casa,” David dijo a Urías: “¿No has venido de hacer un viaje? ¿Por qué no bajaste a tu casa?” 11 Urías respondió a David: “El arca, Israel y Judá están bajo tiendas1 O enramadasA 2 Sam 7:2, 6, y mi señor Joab y los siervos de mi señor acampan a campo abiertoB 2 Sam 20:6. ¿He de ir yo a mi casa para comer, beber y acostarme con mi mujer? Por su vida y la vida de su alma, que no haré tal cosa.” 12 Entonces David dijo a Urías: “Quédate aquí hoy también, y mañana te dejaré irA Job 20:12-14.” Y se quedó Urías en Jerusalén aquel día y el siguiente1 Lit y mañana. 13 Y David lo convidó a comer y a beber con él1 Lit Lo llamó y bebió y comió en su presencia, y lo embriagóA Prv 20:1; 23:29-35. Al anochecer Urías salió a acostarse en su cama con los siervos de su señor, pero no descendió a su casaB 2 Sam 11:9.

14 A la mañana siguiente David escribió una cartaA 1 Rey 21:8-10 a Joab, y la envió por mano de Urías. 15 En la carta había escrito1 Lit escrito, diciendo: “Pongan2 Lit Den a Urías al frente de la batalla más reñida3 Lit fuerte y retírense de él, para que sea herido y mueraA 2 Sam 12:9; Ecl 8:11; Jer 17:9.” 16 Así que cuando Joab asediaba la ciudad, puso a Urías en el lugar donde sabía que había hombres valientes. 17 Y los hombres de la ciudad salieron y pelearon contra Joab, y algunos de los siervos de David cayeron, y murió también Urías el HititaA 2 Sam 11:21.

18 Joab envió a informar a David de todos los sucesos de la guerra, 19 y dio orden al mensajero: “Cuando hayas acabado de contar al rey todos los sucesos de la guerra, 20 si sucede que el furor del rey se enciende1 Lit se sube y te dice: ‘¿Por qué se acercaron tanto a la ciudad para pelear? ¿No sabían que dispararían desde el muro? 21 ¿Quién mató a Abimelec, hijo de Jerobaal? ¿No arrojó una mujer sobre él una muela de molino (piedra de moler) desde lo alto del muro de manera que murió en TebesA Jue 9:50-54? ¿Por qué se acercaron tanto al muro?’ Entonces le dirás: ‘También su siervo Urías el Hitita ha muerto.’ ”

22 Partió, pues, el mensajero, y llegó e informó a David todo lo que Joab le había enviado a decir. 23 Y el mensajero dijo a David: “Los hombres prevalecieron contra nosotros y salieron al campo contra nosotros, pero los rechazamos1 Lit estuvimos sobre ellos hasta la entrada de la puerta. 24 Pero los arqueros tiraron contra sus siervos desde la muralla; y algunos de los siervos del rey han muerto, y también su siervo Urías el Hitita ha muerto.” 25 Entonces David dijo al mensajero: “Así dirás a Joab: ‘No tengas pesar por esto1 Lit No sea esto malo ante tus ojos, porque la espada devora tanto a uno como al otro. Haz más fuerte tu combate contra la ciudad y destrúyela’; y tú aliéntalo.”

26 Al oír la mujer de Urías que su marido Urías había muerto, hizo duelo por su maridoA Gn 50:10; Dt 34:8; 1 Sam 31:13. 27 Cuando pasó el luto, David mandó traerla1 Lit recogerla a su casa, y ella fue su mujer; y dio a luz un hijo. Pero lo que David había hecho fue malo a los ojos del SeñorA 2 Sam 12:9; Sal 51:4, 5.