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Visión de las Cuatro Bestias
En el primer año del rey Belsasar de Babilonia, Daniel tuvo un sueño y visionesA Job 33:14-16; Dan 1:17; 2:1, 26-28; 4:5-9; Joel 2:28 en su mente1 Lit de su cabeza, estando en su cama. Entonces escribió el sueño y relató el resumen2 O el principio de él3 Lit las palabrasB Jer 36:4, 32:
“Miraba yo en mi visión nocturnaA Dan 7:7, 13 que los cuatro vientos del cielo agitaban el gran marB Apoc 7:1; y cuatro bestias enormes, diferentes unas de otras, subían del marA Dan 7:17; Apoc 13:1; 17:8.
La primera era como un leónA Jer 4:7 y tenía alas de águila. Mientras yo miraba, sus alas le fueron arrancadas, fue levantada del suelo y puesta sobre dos pies, como un hombre, y le fue dado corazón de hombre.
Y otra segunda bestia, semejante a un oso, estaba levantada de un costado, y en su boca, entre sus dientes, tenía tres costillas. Y le dijeron así: ‘Levántate, y devora mucha carne.’
Después de esto seguí mirando, y otra más, semejante a un leopardo que tenía sobre su lomo1 O costado cuatro alas de ave. La bestia tenía cuatro cabezas, y le fue dado dominioA Dan 8:22; Apoc 13:2.
Después de esto, seguí mirando en las visiones nocturnas, y vi una cuarta bestia, terrible, espantosa y en gran manera fuerte. Tenía enormes dientes de hierro y devoraba, desmenuzaba y pisoteaba los restos con sus pies. Era diferente de todas las bestias que la antecedieron y tenía diez cuernosA Dan 7:19, 20, 23; Apoc 12:3; 13:1. Mientras yo contemplaba los cuernos, vi que otro cuerno, uno pequeño, surgió entre ellosA Dan 8:9, y tres de los primeros cuernos fueron arrancados delante de él. Y este cuerno tenía ojos1 Lit en este cuerno había ojos como los ojos de un hombre y una boca que hablaba con mucha arrogancia2 Lit hablaba grandes cosasB Apoc 13:5, 6.
 
Seguí mirando
Hasta que se establecieron tronosA Apoc 20:4,
Y el Anciano de Días se sentó.
Su vestidura era blanca como la nieveB Mar 9:3,
Y el cabello de Su cabeza como lana pura,
Su trono, llamas de fuegoC Apoc 1:14,
Y sus ruedas, fuego abrasadorD Ezq 1:13, 26; 10:2, 6.
10 Un río de fuego corría,
Saliendo de delante de ElA Sal 18:8; 50:3; 97:3; Isa 30:27, 33.
Miles de millares Le servían,
Y miríadas de miríadas (innumerables) estaban en pie delante de ElB Dt 33:2; 1 Rey 22:19; Apoc 5:11.
El tribunal se sentóC Sal 96:11-13; Dan 7:22, 26,
Y se abrieron los librosD Dan 12:1; Apoc 20:11-15.
11 Entonces yo seguí mirando a causa del ruido de las palabras arrogantes1 Lit grandes que el cuerno decía. Seguí mirando hasta que mataron a la bestia, destrozaron su cuerpo y lo echaron a las llamas del fuegoA Apoc 19:20; 20:10. 12 A las demás bestias, se les quitó el dominio, pero les fue concedida una prolongación de la vida por un tiempo determinado.
 
13 Seguí mirando en las visiones nocturnas,
Y en las nubes del cielo
Venía uno como un Hijo de HombreA Mat 24:30; 26:64; Mar 13:26; 14:62; Luc 21:27; Apoc 1:7, 13; 14:14,
Que se dirigió al Anciano de Días
Y fue presentado ante El.
14 Y Le fue dado dominio,
Gloria y reino (soberanía)A Dan 2:37,
Para que todos los pueblos, naciones y lenguas
Le sirvieranB Sal 72:11; 102:22.
Su dominio es un dominio eternoC Dan 7:27; Juan 3:35; 1 Cor 15:27; Ef 1:20-22; Fil 2:9-11; Apoc 1:6; 11:15
Que nunca pasaráD Miq 4:7; Luc 1:33,
Y Su reino uno
Que no será destruidoE Heb 12:28.
15 “A mí, Daniel, se me angustió por dentro1 Lit en medio de su envoltura; i.e. del cuerpo el espíritu, y las visiones de mi menteA Dan 7:1 seguían turbándomeB Dan 4:19; 7:28. 16 Me acerqué a uno de los que estaban allí de pie y le pedí que me dijera la verdad acerca de todo esto. Y me respondió, dándome a conocerA Dan 8:16, 17; 9:22 la interpretación de estas cosasB Zac 1:9, 19; Apoc 5:5; 7:13, 14: 17 ‘Estas bestias enormes, que son cuatro, son cuatro reyes que se levantarán de la tierra. 18 Pero los santos del Altísimo recibirán el reino y poseerán el reino para siempre, por los siglos de los siglosA Sal 149:5-9; Isa 60:12-14; Dan 7:14, 22, 25, 27; Apoc 2:26, 27; 20:4; 22:5.’
19 “Entonces quise saber la verdad acerca de la cuarta bestia, que era diferente de todas las demás1 Lit todas ellas, y en gran manera terrible, con sus dientes de hierro y sus garras de bronce, y que devoraba, desmenuzaba y pisoteaba los restos con sus piesA Dan 7:7, 8, 20 y la verdad acerca de los diez cuernos que tenía en su cabeza, y del otro cuerno que había surgido, delante del cual cayeron tres de ellos, es decir, el cuerno que tenía ojos y una boca que hablaba con mucha arrogancia1 Lit grandes cosas, y cuya apariencia era mayor que la de sus compañeros.
21 Mientras yo miraba, este cuerno hacía guerra contra los santos y prevalecía sobre ellosA Apoc 11:7; 13:7, 22 hasta que vino el Anciano de Días y se hizo1 Lit se dio justicia a favor de los santos del Altísimo, y llegó el tiempo cuando los santos tomaron posesión del reinoA Dan 7:10; 1 Cor 6:2, 3.
23 “Después me dijo: ‘La cuarta bestia será un cuarto reino en la tierra, que será diferente de todos los otros reinos. Devorará toda la tierra, la pisoteará y la desmenuzará. 24 Y los diez cuernos de este reino son diez reyes que se levantaránA Dan 7:7; Apoc 17:12, y otro se levantará después de ellos. El será diferente de los anteriores y subyugará a tres reyes. 25 El proferirá palabras contra el AltísimoA Dan 3:26; 4:2, 17, 34; Apoc 13:7; 18:24 y afligirá a los santos del AltísimoB Dan 11:36; Apoc 13:6, e intentará cambiar los tiempos y la ley. Y le serán entregados en sus manos por tres años y medio (un tiempo, tiempos y medio tiempo)C Dan 2:21; 12:7; Apoc 12:14. 26 Pero el tribunal se sentará para juzgarA Apoc 17:14; 19:2, y su dominio le será quitado, aniquilado y destruido para siempre1 Lit para aniquilar y destruir hasta el fin. 27 Y la soberanía (el reino), el dominio y la grandeza de todos los reinos debajo de todo el cielo serán entregados al pueblo de los santos del Altísimo. Su reino será un reino eternoA Isa 54:3; Dan 7:14, 18, 22; Apoc 20:4, y todos los dominios Le serviránB Sal 145:13; Isa 9:7; Dan 2:44; 4:34; 7:14; Luc 1:33; Apoc 11:15; 22:5 y Le obedeceránC Sal 2:6-12; 22:27; 72:11; 86:9; Isa 60:12; Apoc 11:1.’
28 Hasta aquí la revelación1 Lit el fin de la palabra. En cuanto a mí, Daniel, mis pensamientos me turbaron en gran manera y mi rostro palideció2 Lit mi brillantez cambió sobre míA Dan 4:19, pero guardé el asunto en mi corazónB Luc 2:19, 51.”

A7:1 Job 33:14-16; Dan 1:17; 2:1, 26-28; 4:5-9; Joel 2:28

17:1 Lit de su cabeza

27:1 O el principio

37:1 Lit las palabras

B7:1 Jer 36:4, 32

A7:2 Dan 7:7, 13

B7:2 Apoc 7:1

A7:3 Dan 7:17; Apoc 13:1; 17:8

A7:4 Jer 4:7

17:6 O costado

A7:6 Dan 8:22; Apoc 13:2

A7:7 Dan 7:19, 20, 23; Apoc 12:3; 13:1

A7:8 Dan 8:9

17:8 Lit en este cuerno había ojos

27:8 Lit hablaba grandes cosas

B7:8 Apoc 13:5, 6

A7:9 Apoc 20:4

B7:9 Mar 9:3

C7:9 Apoc 1:14

D7:9 Ezq 1:13, 26; 10:2, 6

A7:10 Sal 18:8; 50:3; 97:3; Isa 30:27, 33

B7:10 Dt 33:2; 1 Rey 22:19; Apoc 5:11

C7:10 Sal 96:11-13; Dan 7:22, 26

D7:10 Dan 12:1; Apoc 20:11-15

17:11 Lit grandes

A7:11 Apoc 19:20; 20:10

A7:13 Mat 24:30; 26:64; Mar 13:26; 14:62; Luc 21:27; Apoc 1:7, 13; 14:14

A7:14 Dan 2:37

B7:14 Sal 72:11; 102:22

C7:14 Dan 7:27; Juan 3:35; 1 Cor 15:27; Ef 1:20-22; Fil 2:9-11; Apoc 1:6; 11:15

D7:14 Miq 4:7; Luc 1:33

E7:14 Heb 12:28

17:15 Lit en medio de su envoltura; i.e. del cuerpo

A7:15 Dan 7:1

B7:15 Dan 4:19; 7:28

A7:16 Dan 8:16, 17; 9:22

B7:16 Zac 1:9, 19; Apoc 5:5; 7:13, 14

A7:18 Sal 149:5-9; Isa 60:12-14; Dan 7:14, 22, 25, 27; Apoc 2:26, 27; 20:4; 22:5

17:19 Lit todas ellas

A7:19 Dan 7:7, 8

17:20 Lit grandes cosas

A7:21 Apoc 11:7; 13:7

17:22 Lit se dio

A7:22 Dan 7:10; 1 Cor 6:2, 3

A7:24 Dan 7:7; Apoc 17:12

A7:25 Dan 3:26; 4:2, 17, 34; Apoc 13:7; 18:24

B7:25 Dan 11:36; Apoc 13:6

C7:25 Dan 2:21; 12:7; Apoc 12:14

A7:26 Apoc 17:14; 19:2

17:26 Lit para aniquilar y destruir hasta el fin

A7:27 Isa 54:3; Dan 7:14, 18, 22; Apoc 20:4

B7:27 Sal 145:13; Isa 9:7; Dan 2:44; 4:34; 7:14; Luc 1:33; Apoc 11:15; 22:5

C7:27 Sal 2:6-12; 22:27; 72:11; 86:9; Isa 60:12; Apoc 11:1

17:28 Lit el fin de la palabra

27:28 Lit mi brillantez cambió sobre mí

A7:28 Dan 4:19

B7:28 Luc 2:19, 51