10
Las moscas muertas hacen que el ungüento del perfumistaA Ex 30:25 dé mal olor;
Un poco de insensatez pesa más que la sabiduría y el honor.
El corazón del sabio lo guía hacia la derecha,
Y el corazón del necio, hacia la izquierdaA Mat 6:33; Col 3:1.
Aun cuando el necio ande por el camino,
Le falta entendimiento1 Lit corazón
Y demuestra2 Lit dice a todos que es un necioA Prv 13:16; 18:2.
Si la ira1 Lit el espíritu del gobernante se levanta contra ti,
No abandones tu puestoA Ecl 8:3,
Porque la serenidad suaviza grandes ofensasB 1 Sam 25:24-33; Prv 25:15.
 
Hay un mal que he visto bajo el sol,
Como error que procede del gobernante:
La necedad colocada en muchos lugares elevadosA Est 3:1, 5, 6; Prv 28:12; 29:2,
Mientras los ricos se sientan en lugares humildes.
He visto siervosA Prv 19:10 a caballoB Est 6:8-10
Y príncipes caminando como siervos sobre la tierra.
 
El que cava un hoyo cae en élA Sal 7:15; Prv 26:27,
Y al que abre brecha en un muro, lo muerde la serpienteB Am 5:19.
El que saca piedras, puede lastimarse con ellas,
Y el que corta leña, puede lesionarse con ella.
10 Si el hierro está embotado y él no ha amolado su filo,
Entonces tiene que ejercer más fuerza;
La sabiduría tiene la ventaja de impartir éxito.
11 Si la serpiente muerde antes de ser encantada1 Lit sin encantamientoA Sal 58:4, 5; Jer 8:17,
No hay ganancia para el encantador.
12 Llenas de gracia son las palabrasA Prv 10:32; 22:11; Luc 4:22 de la boca del sabio,
Mientras que los labios del necio a él lo consumenB Prv 10:14; 18:7; Ecl 4:5,
13 El comienzo de las palabras de su boca es insensatez,
Y el final de su habla1 Lit su boca perversa es locuraA Ecl 7:25.
14 El necio multiplica las palabrasA Prv 15:2; Ecl 5:3,
Pero nadie sabe lo que sucederá,
¿Y quién le hará saber lo que ha de suceder después de élB Ecl 3:22; 6:12; 7:14; 8:7?
15 El trabajo del necio lo1 Lit de los necios los cansa tanto
Que no sabe ir a la ciudad.
16 ¡Ay de ti, tierra, cuyo rey es un muchachoA Isa 3:4, 12,
Y cuyos príncipes banquetean1 Lit comen de mañana!
17 Bienaventurada tú, tierra, cuyo rey es de noble cuna
Y cuyos príncipes comen a su debida hora,
Para fortalecerse y no para embriagarseA Prv 31:4; Isa 5:11.
18 Por negligencia se hunde el techo,
Y por pereza tiene goteras la casaA Prv 24:30-34.
19 Para el placer se prepara la comida,
Y el vino alegra la vidaA Jue 9:13; Sal 104:15; Ecl 2:3,
Y el dinero es la respuesta para1 Lit responde a todoB Ecl 7:12.
20 Ni aun en tu recámara1 Lit pensamiento maldigas al reyA Ex 22:28; Hech 23:5,
Ni en tus alcobas maldigas al rico,
Porque un ave de los cielos llevará el rumor,
Y un ser alado hará conocer el asuntoB 2 Rey 6:12; Luc 12:3.

A10:1 Ex 30:25

A10:2 Mat 6:33; Col 3:1

110:3 Lit corazón

210:3 Lit dice

A10:3 Prv 13:16; 18:2

110:4 Lit el espíritu

A10:4 Ecl 8:3

B10:4 1 Sam 25:24-33; Prv 25:15

A10:6 Est 3:1, 5, 6; Prv 28:12; 29:2

A10:7 Prv 19:10

B10:7 Est 6:8-10

A10:8 Sal 7:15; Prv 26:27

B10:8 Am 5:19

110:11 Lit sin encantamiento

A10:11 Sal 58:4, 5; Jer 8:17

A10:12 Prv 10:32; 22:11; Luc 4:22

B10:12 Prv 10:14; 18:7; Ecl 4:5

110:13 Lit su boca

A10:13 Ecl 7:25

A10:14 Prv 15:2; Ecl 5:3

B10:14 Ecl 3:22; 6:12; 7:14; 8:7

110:15 Lit de los necios los

A10:16 Isa 3:4, 12

110:16 Lit comen

A10:17 Prv 31:4; Isa 5:11

A10:18 Prv 24:30-34

A10:19 Jue 9:13; Sal 104:15; Ecl 2:3

110:19 Lit responde a

B10:19 Ecl 7:12

110:20 Lit pensamiento

A10:20 Ex 22:28; Hech 23:5

B10:20 2 Rey 6:12; Luc 12:3