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Prosperidad del que Teme al Señor
1 ¡Aleluya!
Cuán bienaventurado es el hombre que teme al SeñorA Sal 128:1,
Que mucho se deleita en Sus mandamientosB Sal 1:2; 119:14, 16.
2 Poderosa en la tierra será su descendenciaA Sal 102:28; 127:4;
La generación de los rectos será benditaB Sal 128:4.
3 Bienes y riquezas hay en su casaA Prv 3:16; 8:18; Mat 6:33,
Y su justicia permanece para siempre.
4 Luz resplandece en las tinieblas para el que es rectoA Job 11:17; Sal 97:11;
El es clemente, compasivo y justoB Sal 37:26.
5 Bien le va al hombre que se apiada y prestaA Sal 37:21;
Arreglará sus asuntos con juicio.
6 Porque nunca será sacudidoA Sal 15:5; 55:22;
Para siempre será recordado el justoB Prv 10:7.
Hasta que vea vencidos a sus adversariosC Sal 54:7; 59:10.
9 Con liberalidad ha dado a los pobresA 2 Cor 9:9;
Su justicia permanece para siempre;
Su poder será exaltado con honorB Sal 75:10; 89:17; 92:10; 148:14.
10 Lo verá el impío y se irritaráA Sal 86:17;
Rechinará los dientesB Sal 35:16; 37:12; Mat 8:12; 25:30; Luc 13:28 y se consumiráC Sal 58:7;
El deseo de los impíos pereceráD Job 8:13; Prv 10:28; 11:7.