1 Cuando oyó Isboset, hijo1 Así en algunos mss.; en el T.M., oyó el hijo de Saúl, que Abner había sido muerto en HebrónA 2 Sam 3:27, se llenó de miedo2 Lit cayeron sus manosB Esd 4:4, y todo Israel se turbó. 2 El hijo de Saúl tenía dos hombres que eran jefes de bandas: el nombre de uno era Baana, y el del otro Recab, hijos de Rimón el Beerotita, de la tribu de Benjamín (porque BeerotA Jos 9:17; 18:25 es también considerado parte de Benjamín, 3 pues los Beerotitas habían huido a GitaimA Neh 11:33 y han sido extranjeros allí hasta el día de hoy).

4 Jonatán, hijo de Saúl, tenía un hijo lisiado de los piesA 2 Sam 9:3, 6. Este tenía cinco años cuando de Jezreel llegaron las noticias de la muerte de Saúl y Jonatán, y su nodriza lo tomó y huyóB 1 Sam 31:1-4, pero sucedió que en su prisa por huir, él se cayó y quedó cojo. Su nombre era Mefiboset1 En 1 Cró 8:34 y 9:40, Merib-baalC 1 Cró 8:34; 9:40.

5 Y los hijos de Rimón el Beerotita, Recab y Baana, fueron y entraron en la casa de IsbosetA 2 Sam 2:8 en el calor del día, mientras él dormía la siesta. 6 Llegaron hasta la mitad de la casa como si fueran a buscar trigo1 Lit recogedores de trigo, y lo hirieronA 2 Sam 2:23 en el vientre. Después Recab y su hermano Baana escaparon. 7 Habían entrado en la casa mientras Isboset1 Lit él estaba acostado en su lecho, en su alcoba; lo hirieron y lo mataron, y le cortaron la cabeza. Y tomando su cabeza, anduvieron toda la noche camino del ArabáA 2 Sam 2:29, 8 y trajeron la cabeza de Isboset a David en Hebrón, y dijeron al rey: “Esta es la cabeza de Isboset, hijo de su enemigo Saúl, el que buscaba su vidaA 1 Sam 24:4; 25:29; de esta manera el Señor hoy ha concedido venganza a mi señor el rey sobre Saúl y sus descendientes1 Lit su simiente.”

9 Respondiendo David a Recab y a su hermano Baana, hijos de Rimón el Beerotita, les dijo: “Vive el Señor que ha redimido mi vida de toda angustiaA Gn 48:16; 1 Rey 1:29; Sal 31:7, 10 porque cuando uno me avisó: ‘Saúl ha muerto,’ pensando que me traía buenas noticias1 Lit y él era portador de buenas noticias ante sus propios ojos, yo lo prendí y lo maté en Siclag, lo cual fue el pago que le di por sus noticiasA 2 Sam 1:2, 4, 15. 11 ¿Cuánto más, cuando hombres malvados han matado a un hombre justo en su propia casa y sobre su cama, no demandaré ahora su sangre de las manos de ustedesA Gn 9:5; Sal 9:12, borrándolos1 Lit quemándolos de la tierra?” 12 Y David dio una orden a los jóvenes, y ellos los mataronA 2 Sam 1:15 y les cortaron las manos y los pies y los colgaron junto al estanque en Hebrón. Pero tomaron la cabeza de Isboset y la sepultaron en el sepulcro de Abner, en HebrónB 2 Sam 3:32.