1 Festo, entonces, tres días después de haber llegado a la provinciaA Hech 23:34, subió a Jerusalén desde CesareaB Hech 8:40; 25:4, 6, 13. 2 Y los principales sacerdotes y los Judíos más influyentes le presentaron acusaciones contra PabloA Hech 24:1; 25:15, e insistían con Festo1 Lit a él, 3 pidiéndole, el favor1 O una concesión de que hiciera traer a Pablo a Jerusalén2 Lit enviara por él a Jerusalén, preparando ellos, al mismo tiempo, una emboscada para matarloA Hech 9:24 en el camino.

4 Pero Festo respondióA Hech 25:16 que Pablo estaba bajo custodiaB Hech 24:23 en CesareaC Hech 8:40; 25:1, 6, 13, y que en breve él mismo saldría para allá. 5 Por tanto dijo: “Que los más influyentes de ustedes vayan allá1 Lit desciendan conmigo, y si hay algo malo en el hombre, que lo acusen.”

6 Después de haberse quedado no más de ocho o diez días entre ellos, descendió a CesareaA Hech 8:40; 25:1, 4, 13, y al día siguiente se sentó en el tribunalB Mat 27:19; Hech 25:10, 17 y ordenó que trajeran a Pablo. 7 Cuando éste llegó, lo rodearon los Judíos que habían descendido de Jerusalén, presentando contra él muchas y graves acusacionesA Hech 24:5, 6 que no podían probarB Hech 24:13, 8 mientras Pablo decía en defensa propia: “No he cometido ningún delito, ni contra la Ley de los Judíos, ni contra el temploA Hech 6:13; 24:12; 28:17, ni contra el César (Nerón).”

9 Pero Festo, queriendo hacer un favor a los JudíosA Hech 12:3; 24:27, respondió a Pablo, y dijo: “¿Estás dispuesto a subir a Jerusalén y a ser juzgado delante de mí por estas acusacionesB Hech 25:20?” 10 Entonces Pablo respondió: “Ante el tribunalA Mat 27:19; Hech 25:6, 17 del César estoy, que es donde debo ser juzgado. Ningún agravio he hecho a los Judíos, como también usted muy bien sabe. 11 Si soy, pues, un malhechor y he hecho algo digno de muerte, no rehúso morir. Pero si ninguna de esas cosas de que éstos me acusan es verdad, nadie puede entregarme a ellos. Apelo al CésarA Hech 25:21, 25; 26:32; 28:19.” 12 Entonces Festo, habiendo deliberado con el consejo1 Un cuerpo distinto del que se menciona en Hech 4:15 y 24:20, respondió: “Al César has apelado, al César irás.”

13 Pasados varios días, el rey Herodes Agripa II y Berenice llegaron a CesareaA Hech 8:40; 25:1, 4, 6 y fueron a saludar a Festo1 Lit saludando a Festo. 14 Como estuvieron allí muchos días, Festo presentó el caso de Pablo ante el rey, diciendo: “Hay un hombre que Félix dejó presoA Hech 24:27, 15 acerca del cual, estando yo en Jerusalén, los principales sacerdotes y los ancianos de los Judíos presentaron acusaciones contra élA Hech 24:1; 25:2, pidiendo sentencia condenatoria contra él. 16 Yo les respondíA Hech 25:4, 5 que no es costumbre de los Romanos entregar a un hombre sin que antes el acusado confronte a sus acusadoresB Hech 23:30, y tenga la oportunidad de defenderse de los cargos.

17 Así que cuando1 O después de que se reunieron aquí, sin ninguna demora, al día siguiente me senté en el tribunalA Mat 27:19; Hech 25:6, 10 y ordené traer al hombre. 18 Levantándose los acusadores, presentaban acusaciones contra él, pero no de la clase de crímenes que yo suponía, 19 sino que simplemente tenían contra él ciertas cuestionesA Hech 18:15; 23:29 sobre su propia religión1 O supersticiónB Hech 17:22, y sobre cierto Jesús, ya muerto, de quien Pablo afirmaba que estaba vivo.

20 “Pero estando yo perplejo cómo investigar estas cuestiones, le pregunté si estaba dispuesto a ir a Jerusalén y ser juzgado de estas cosas alláA Hech 25:9. 21 Pero como Pablo apelóA Hech 25:11, 12 que se le tuviera bajo custodia para que el emperador Nerón diera el fallo, ordené que continuara bajo custodia hasta que yo lo enviara al César.” 22 Entonces Agripa IIA Hech 9:15 dijo a Festo: “A mí también me gustaría oír al hombre.” “Mañana lo oirás,” dijo Festo.

23 Así que al día siguiente, cuando Agripa II y BereniceA Hech 25:13; 26:30 entraron al auditorio en medio de gran pompa, acompañados por1 Lit y con los comandantes2 Gr quiliarcas; i.e. oficiales militares Romanos al mando de mil soldados y los hombres importantes de la ciudad, por orden de Festo, fue traído Pablo. 24 Y Festo dijo: “Rey Agripa y todos los demás1 Lit varones aquí presentes con nosotros; éste es el hombre acerca del cual los JudíosA Hech 25:2, 7, tanto en Jerusalén como aquí, me hicieron una petición declarando a gritos que no debe vivir másB Hech 22:22.

25 “Pero a mí me parece que no ha hecho nada digno de muerteA Luc 23:4; Hech 23:29, pero como él mismo apeló al emperador (Nerón), he decidido enviarloB Hech 25:11, 12 a Roma. 26 Sin embargo, no tengo nada definido sobre él1 Lit Sobre el cual no tengo nada definido para escribirle a mi señor. Por eso lo he traído ante ustedes, y especialmente ante ti, rey Agripa, para que después de que se le interrogue2 Lit se haya hecho el interrogatorio, yo tenga algo que escribir. 27 Porque me parece absurdo, al enviar un preso, no informar también de los cargos en su contra.”