1 Oráculo (Profecía) de la palabra del SeñorA Isa 13:1; Nah 1:1; Hab 1:1; Zac 9:1 a IsraelB Mal 2:11 por medio de Malaquías (Mi mensajero).

2 “Yo los he amado,” dice el SeñorA Dt 4:37; 7:8; 23:5; Isa 41:8, 9; Jer 31:3; Juan 15:12. Pero ustedes dicen: “¿En qué nos has amado?” “¿No era Esaú hermano de Jacob?” declara el Señor. “Sin embargo, Yo amé a JacobB Rom 9:13, 3 y aborrecí a Esaú, e hice de sus montes desolación, y di su heredad a los chacales del desiertoA Jer 49:10, 16-18; Ezq 35:3, 4, 7, 8, 15.” 4 Aunque Edom dice: “Hemos sido destruidosA Jer 5:17, pero volveremos y edificaremos las ruinasB Isa 9:9, 10,” el Señor de los ejércitos dice así: “Ellos edificarán, pero Yo destruiréC Am 3:15; 5:11; 6:11. Y los llamarán territorio impío y pueblo contra quien el Señor está indignado para siempreD Ezq 35:9; Abd 10.” 5 Sus ojos lo verán, y ustedes dirán: “Sea engrandecidoA Sal 35:27; Miq 5:4 el Señor más allá de la frontera de Israel.”

6 “El hijo honra a su padreA Ex 20:12; Prv 30:11, 17, y el siervo a su señor. Pues si Yo soy padre, ¿dónde está Mi honor? Y si Yo soy señor, ¿dónde está Mi temorB Dt 1:31; Isa 1:2; Jer 3:4; Mal 2:10?” dice el Señor de los ejércitos a ustedes sacerdotes que desprecian Mi nombreC Sof 3:4; Mal 2:1-9. Pero ustedes dicen: ‘¿En qué hemos despreciado Tu nombre?’ 7 En que ustedes ofrecen pan inmundoA Lv 3:11; 21:6, 8 sobre Mi altarB Mal 1:8, 13. Y ustedes preguntan: ‘¿En qué Te hemos deshonrado?’ En que dicen: ‘La mesa del Señor es despreciableC Mal 1:12.’ 8 “Y cuando presentan un animal ciego para el sacrificio, ¿no es eso malo? Y cuando presentan el cojo y el enfermoA Lv 22:22; Dt 15:21, ¿no es eso malo? ¿Por qué no lo ofreces a tu gobernadorB Hag 1:1? ¿Se agradaría de ti o te recibiría con benignidad?” dice el Señor de los ejércitos. 9 “Ahora pues, ¿no pedirán ustedes el favor de Dios, para que se apiade de nosotrosA Jer 27:18; Joel 2:12-14? Con tal ofrenda de su parteB Am 5:22, ¿los recibirá El con benignidad?” dice el Señor de los ejércitos.

10 “¡Oh, si hubiera entre ustedes quien cerrara las puertas para que no encendieran Mi altar en vano! No me complazco en ustedesA Jer 14:10, 12; Os 5:6,” dice el Señor de los ejércitos “ni de su mano aceptaré ofrendaB Isa 1:13. 11 Porque desde la salida del sol hasta su puesta, Mi nombre será grande entre las nacionesA Isa 45:6, y en todo lugar se ofrecerá inciensoB Isa 60:6 a Mi nombreC Sal 111:9, y ofrenda pura de cereal; porque grande será Mi nombre entre las nacionesD Isa 66:18, 19,” dice el Señor de los ejércitosE Isa 12:4, 5; 54:5; Jer 10:6, 7. 12 “Pero ustedes lo profanan, cuando dicen: ‘La mesa del Señor es inmunda, y su fruto, su alimento despreciableA Mal 1:7.’ ” 13 “También dicen: ‘¡Ay, qué fastidioA Isa 43:22!’ Y con indiferencia lo desprecianB Lv 6:4; Isa 61:8,” dice el Señor de los ejércitosC Mal 1:8 “y traen lo robado, o cojo, o enfermo; así traen la ofrenda. ¿Aceptaré eso de su mano?” dice el SeñorD Mal 1:10. 14 “¡Maldito sea el engañadorA Hech 5:1-4 que tiene un macho en su rebaño, y lo prometeB Lv 22:18-20, pero sacrifica un animal dañado al Señor! Porque Yo soy el Gran ReyC Zac 14:9,” dice el Señor de los ejércitos “y Mi nombre es temido (reverenciado) entre las nacionesD Sof 2:11.”